seguridad en alturas

La seguridad en altura es una responsabilidad compartida

En Nilsson, tratamos cada intervención técnica como una oportunidad para demostrar compromiso, profesionalidad y, sobre todo, respeto por la seguridad. Sabemos que trabajar en sistemas de refrigeración evaporativa no solo exige conocimientos técnicos, sino también una rigurosa preparación en materia de prevención de riesgos. Especialmente cuando se trata de trabajos en altura, donde cualquier descuido puede tener consecuencias graves.

Por eso afirmamos con claridad: la seguridad no es negociable. Y más aún, la seguridad en altura es una responsabilidad compartida. No solo compete a nuestros técnicos, sino también a la empresa, a los responsables de prevención, a los gestores de instalaciones y, en última instancia, a todos los actores implicados en que una intervención técnica se realice con éxito.

Subir a un evaporativo no es una tarea menor

Los sistemas evaporativos, ya estén ubicados en cubiertas, azoteas o estructuras elevadas, exigen que nuestros profesionales accedan a zonas de difícil alcance, a menudo expuestos a condiciones climáticas adversas o a superficies resbaladizas.

Subir a estos equipos no puede hacerse sin una evaluación previa ni sin contar con el equipo adecuado. Cada paso, desde el acceso hasta la intervención técnica, debe estar respaldado por medidas preventivas claras, equipos certificados y protocolos definidos.

Nuestro compromiso: seguridad como base del servicio

En Nilsson, cada técnico que realiza trabajos en altura cuenta con:

  • Arnés de seguridad y sistemas de anclaje certificados, adecuados al tipo de estructura e intervención.
  • Calzado antideslizante, resistente y adaptado a entornos industriales, junto con un casco de protección homologado.
  • Formación específica en trabajos en altura, actualizada de forma periódica conforme a la normativa vigente.
  • Procedimientos internos de revisión y supervisión, que aseguran que todas las medidas se aplican antes, durante y después de cada intervención.

Además, promovemos una cultura de seguridad activa, en la que el propio técnico tiene autoridad y obligación de detener cualquier intervención si detecta condiciones inseguras. Nuestro objetivo no es solo prevenir accidentes, sino también empoderar a nuestro equipo para que actúe con responsabilidad y criterio.

Seguridad y calidad van de la mano

A menudo se habla de seguridad como una obligación legal, pero en Nilsson la entendemos como algo más: una extensión natural de nuestro compromiso con la calidad. Trabajar en condiciones seguras no solo protege al técnico, sino que también mejora la eficacia del trabajo, reduce los errores, evita daños en los equipos y genera confianza en nuestros clientes.

Una intervención realizada con prisas o sin las protecciones adecuadas no solo pone en riesgo al profesional, sino que también puede comprometer la instalación completa. Por eso, garantizar la seguridad es también garantizar un servicio técnico excelente.

Cuidar de quienes hacen posible nuestro trabajo diario

Nada de lo que hacemos en Nilsson sería posible sin nuestros técnicos. Son ellos quienes suben, revisan, limpian, reparan y optimizan los sistemas evaporativos con profesionalidad y dedicación. Y por eso, cuidar de ellos es cuidar del corazón de nuestra empresa.

Invertir en formación, en equipos de protección, en tiempo para revisar procedimientos y en cultura preventiva no es un gasto: es una inversión en talento humano, en excelencia técnica y en relaciones duraderas con nuestros clientes.


En Nilsson, la seguridad en altura no es solo una norma. Es una forma de demostrar quiénes somos, cómo trabajamos y qué valoramos. Porque trabajar con responsabilidad es también una forma de respeto.

Scroll al inicio